- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO"
En Revista Almiar, MARGEN CERO © Fundadora de la Asociación de Revistas Culturales de España, ISSN 1695-4807 Nº 34 – 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
OBRA TÍTULO: RICHARD RORTY; PRAGMATISMO Y LITERATURA
AUTOR: ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
TÉCNICA MIXTA: Collage, intervención digital, tinta sobre cartulina preparada.
COLECCIÓN. LA CONDICIÓN POSTHUMANA
AÑO. 2012
© Todos los derechos reservados
En Artelista
<http://www.artelista.com/obra/1697926411970320-richard-rorty-pragmatismo-y-literatura.html>
Rorty por Adolfo Vasquez Rocca Doctor en Filosofía
Adolfo Vasquez Rocca | Universidad Complutense de Madrid
- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO"
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "Rorty: el Giro narrativo de la Ética o la Filosofía como género literario", en PHILOSOPHICA, Nº 29, 2006, PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE VALPARAÍSO, pp. 323 – 334
<http://serbal.pntic.mec.es/~cmunoz11/vasquez42.pdf>
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, “PRAGMATISMO Y POLÍTICA EN RORTY; LA CONSTRUCCIÓN DEL ESPACIO PÚBLICO”, En ASTROLABIO: Revista internacional de Filosofía, Nº 2, 2006, UNIVERSIDAD DE BARCELONA, pp. 24-34.
<http://www.ub.es/astrolabio/Articulos2/Victor.vasquez.rocca.pdf>
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RORTY: EL GIRO NARRATIVO DE LA ÉTICA O LA FILOSOFÍA COMO GÉNERO LITERARIO"
En A Parte Rei 42, noviembre de 2005, REVISTA DE LA SOCIEDAD DE ESTUDIOS FILOSÓFICOS DE MADRID.
http://serbal.pntic.mec.es/AParteRei/vasquez42.pdf
Adolfo Vasquez Rocca | Universidad Complutense de Madrid
Adolfo Vasquez Rocca | Universidad Andrés Bello
RICHARD RORTY; EL PRAGMATISMO
Y LA FILOSOFÍA COMO GÉNERO LITERARIO
_______________________________
Adolfo Vásquez Rocca
Y LA FILOSOFÍA COMO GÉNERO LITERARIO
_______________________________
Adolfo Vásquez Rocca
In memoriam R. RORTY
[1931 - 2007]
[1931 - 2007]
Hace
algunos años cuando dicté mi primer Seminario de Postgrado acerca de
Richard Rorty tuve algunos estudiantes inscritos, otros como alumnos
libres en calidad de «turistas-curiosos» ante la expectativa de algo no
muy corriente: un filósofo norteamericano, más aún, un férreo opositor a
la política de Bush, nacido en una familia trotskista, defensor de la
literatura como fuente de una ética colectiva.
Desde
el comienzo Rorty me pareció un pensador de una honestidad poco
frecuente en la Filosofía, que además de un inigualable estilo (se puede
llegar a discutir si Rorty es o no el pensador más importante de la
actualidad, pero es indiscutible que es el mejor escritor filosófico
surgido desde Bertrand Russell) poseía un atípico sentido del humor,
propio del ironista, alguien capaz de distanciarse de sí mismo y no
tomarse demasiado en serio.
Así,
con Rorty descubrí un nuevo estado de ánimo en la Filosofía. Con él se
inauguraba una actitud postpesimista, así como una renovada disposición
al debate transparente y frontal, una invitación al diálogo
interdisciplinario genuino, a la discusión crítica y al desarrollo de un
pensamiento original e independiente, «al aire libre» —por decirlo de
alguna forma— como condición de la higiene y buena salud de la
Filosofía. Así con Rorty —me pareció— la Filosofía podía salir del marco
hermético de ciertos departamentos universitarios, aislados y
emplazados como sociedades secretas, con sus propias retóricas, sus
propios ritos de iniciación e incluso sus propios santones.
Rorty
rescató a la filosofía de sus limitaciones analíticas y la devolvió a
preocupaciones centrales tocantes a las formas de organizar la
convivencia en una comunidad política, como entablar diálogos con gente
en apariencia no sólo diferente, sino hostil a las posiciones en que nos
encontramos instalados en la vida.
Para
Rorty, la convergencia entre pragmatismo y mentalidad norteamericana
radica precisamente en esto y opera sustituyendo «las nociones de
“realidad”, “razón” y “naturaleza” por la noción de “futuro humano
mejor”». Según esta interpretación posmoderna, Dewey y en general el
pragmatismo, ya sea «clásico» o contemporáneo, no creen que exista un
modo de ser real de las cosas, sino sólo descripciones más o menos
«útiles» del mundo y de nosotros mismos. Útil para crear un futuro
mejor.
El
pragmatismo (o neopragmatismo) que Rorty contribuyó a difundir ha
permitido recuperar la idea de una filosofía norteamericana, de un modo
norteamericano de encarar las cosas, desde una «nueva» perspectiva,
definida por su desapego a la metafísica y por oposición a las
corrientes filosóficas de la «vieja Europa» como el positivismo, la
filosofía analítica y la fenomenología.
El
pragmatismo, en este punto, puede sintetizarse como un rechazo por la
noción de verdad objetiva. La verdad, para el pragmatismo, es
circunstancial, aunque no completamente relativa sino resultado de un
acuerdo o convención. Esta filosofía critica también la idea de una
racionalidad ahistórica, capaz de definir de antemano el carácter de lo
que es moral y de lo que no lo es, y finalmente rechaza la pretendida
«objetividad» de los hechos y de las explicaciones que de ellos nos
forjamos. Ahora, lo que está todavía en cuestión es en qué medida las
aspiraciones del pragmatismo puedan corresponderse con las efectivas
prácticas políticas y tecnocientíficas que identifican hoy a lo
norteamericano. De hecho, Rorty mismo da cuenta de esa incertidumbre.
Es
necesario por tanto abandonar la pretensión de «conocer» la realidad
para preguntarse lo único verdaderamente concreto y útil: «¿Podemos
mejorar nuestro futuro?». En el fondo lo importante es la esperanza de
crear un mundo nuevo para que nuestros descendientes puedan vivir en él
con «más posibilidades y libertad» que lo que hoy podemos imaginar. Ésta
es la razón por la que Dewey insiste en el hecho de que la búsqueda de
un conocimiento seguro debe ser sustituida por el reclamo a la
imaginación. Aquí radica, en opinión de Rorty, todo el espíritu
«americano»: «uno debe dejar de preocuparse por si lo que cree está bien
fundado y comenzar a preocuparse por si ha sido lo suficientemente
imaginativo como para pensar alternativas interesantes a las propias
creencias actuales».
Rorty,
fue profesor de Filosofía en la Universidad de Princeton, hasta que
desilusionado con la mezquindad intelectual de las cátedras de
filosofía, renunció a la suya para ocupar el puesto de profesor de
Humanidades en la Universidad de Virginia, y es precisamente el
antiesencialismo y el antifundamentalismo —esto es la renuncia a toda
pretensión de poseer un método o una posición privilegiada para acceder a
la «verdad»—
lo que está en la base de esta renuncia. Rorty concluyó su larga
carrera académica mudándose a la cátedra de Letras de Stanford, en 1998.
Allí llegó a ser un profesor muy querido por colegas y alumnos, sus
cursos estaban siempre atestados de jóvenes estudiantes ansiosos de oír a
este deportista de la buena fe y del buen tono, cosa tan poco habitual
en las implacables arenas del debate intelectual contemporáneo. Rorty
admiraba profundamente a las personas, prestaba atención a sus alumnos,
amaba la literatura con pasión y gozaba profundamente de su trabajo.
Rorty
optó por situar a la filosofía junto con la crítica literaria, la
poesía, el arte y otras formas de las así llamadas humanidades y yo que
por aquel entonces me integraba a un Departamento Universitario de Artes y Humanidades
no pude sino terminar prestando atención a este intelectual atípico,
lleno de entusiasmo pese a los más de 70 años que llevaba a cuestas y la
carga de ser el último pensador norteamericano.
Rorty,
gracias a su formación en la tradición de la filosofía analítica
angloamericana y su vinculación con el pensamiento centroeuropeo,
lograba como ningún otro filosofo contemporáneo convocar a estudiantes
con intereses diversos, desde la analítica dura a la literatura y la
poesía. Para él, integrar diversas corrientes en sus investigaciones
filosóficas le resultaba natural, estaba particularmente dotado para
resistir ante la amenaza constante que acecha a toda filosofía (desde
dentro) de convertirse en ideología, en una militancia totalitaria y
sesgada. Rorty, en cambio, concedía a sus ideas el carácter de modestas
descripciones, provisorias y contingentes, aún cuando se esforzaba por
seducir a sus interlocutores, jamás rozó el dogmatismo ni hizo
adoctrinamiento ni proselitismo de lo que ya se dejaba entrever como una
Filosofía de nuevo cuño, un nuevo estilo de encarar las cosas, lo que
luego vendría a ser el neo-pragmatismo, donde hablar del mundo —más allá
de toda ingenuidad realista— vino a ser simplemente valerse de las
metáforas favoritas de uno para realizar un arreglo del mundo, para
construir una narrativa exitosa, una que funcione, estamos, no hay que
olvidarlo, ante el heredero de la tradición pragmatista norteamericana.
Rorty desde este suelo ha dialogado con las grandes corrientes
filosóficas contemporáneas, desde la filosofía analítica a la teoría
crítica, y con sus grandes autores, desde Martin Heidegger hasta John
Rawls.
Rorty
realizaba además una atractiva apuesta por la literatura como fuente de
una ética de la solidaridad, apuesta que refrendó con su biografía, la
misma que acaba de cerrar su última página con su fallecimiento en la
Universidad de Stanford hace poco más de un mes, el pasado 8 de junio, a
los 75 años.
Lo
que sigue es la transcripción de un artículo que fue publicado
originalmente en el Nº 27 de Revista Philosophica —publicación oficial
del Instituto de Filosofía de la Pontificia Universidad Católica de
Valparaíso.
Rorty por Adolfo Vasquez Rocca Doctor en Filosofía
o la filosofía como género literario
I
Rorty
nació en Nueva York, en 1931. Fue profesor de filosofía en la
Universidad de Princeton hasta que en 1983 renunció a su cátedra de
filosofía para ocupar el puesto de profesor de Humanidades en la
Universidad de Virginia y posteriormente el de Literatura comparada en
Stanford. Dicho cambio profesional no es ajeno a sus tesis sobre el
papel de la filosofía. Rorty rechaza la filosofía como una búsqueda
privilegiada de fundamentos. En este sentido se sitúa, por una parte, en
la línea que entronca con el pragmatismo americano, especialmente en la
tradición de Dewey; y por otra, en la línea de la filosofía
postnietzscheana de Wittgenstein y Heidegger que retoman el impulso
poético como camino a la reflexión y, finalmente, entronca con la
crítica de filósofos como Quine, Sellars y Davidson al esencialismo y al
dogma del representacionismo.
Richard Rorty parte en Contingencia, ironía y solidaridad [1]
de la contingencia del lenguaje, del yo y de la comunidad liberal.
Basándose en la actitud wittgensteiniana desarrollada por Davidson,
Rorty afirma la historicidad del lenguaje. El lenguaje y la cultura
europea no son más que una contingencia, en expresión de Rorty el resultado de «miles de pequeñas mutaciones». [2]
Precisamente
lo que los románticos expresaban al afirmar que la imaginación, y no la
razón, es la facultad humana fundamental era el descubrimiento de que
el principal instrumento de cambio cultural es el talento de hablar de
forma diferente respecto del «mundo» y sus instituciones, más que el talento de argumentar bien. El cambio de «juegos de lenguaje» y de otras prácticas sociales puede producir seres humanos de una especie que antes nunca había existido.
Este
último «método» de la filosofía es igual al «método» de la política
utópica o de la ciencia revolucionaria (como opuesta a la política
parlamentaria). El método consiste en la redescripción de nuevas «formas de vida»,
hasta que se logre crear una pauta de conducta lingüística que la
generación en ciernes se siente tentada a adoptar, haciéndoles así
buscar estas nuevas formas de conducta no lingüística: por ejemplo, la
adopción de nuevo enfoque científico o la conformación de nuevas
instituciones sociales. Sugiere que, por ejemplo, podríamos proponernos
dejar de hacer ciertas cosas y comenzar a hacer otras. Pero, como debe
advertirse, no se trata de argumentar en favor de esa sugerencia sobre
la base de los criterios precedentes comunes al viejo y al nuevo juego
del lenguaje. Pues en la medida en que el nuevo lenguaje sea realmente
nuevo, no podrá haber tales criterios.
De
acuerdo con esta estrategia, no habrá de ofrecerse argumentos en contra
del léxico que nos proponemos sustituir. En lugar de ello se intentará
hacer que el léxico que preferimos se presente atractivo y deseable,
mostrando el modo en que se puede emplear para describir nuevos «modos de ser humano» o de organizar la convivencia.
Es
en este contexto que, para Rorty, se da una férrea concatenación entre
verdades —léxicos— y «formas de vida», de suerte que si hay verdades es
porque hay lenguajes y si hay nuevos lenguajes habrá nuevos tipos de
seres humanos. La verdad, como reinvención del mundo, depende de los
léxicos, de la construcción de nuevas ficciones, esto es, de léxicos
que no pueden ser sino construcciones de los seres humanos. Según esto
no poseemos una conciencia prelinguística a la que el lenguaje deba
ajustarse, no tenemos una percepción profunda de cómo son las cosas, lo
que tenemos es simplemente una disposición a emplear el lenguaje de
nuestros ancestros, a venerar los cadáveres de sus metáforas.
El
lenguaje cobra aquí una importancia capital. La ciencia, así como la
ética, aparecen en Rorty como un género literario y la literatura como
un género de investigación. Entre los enunciados de hecho y los
enunciados de valor no hay ninguna distinción absoluta e independiente
de acuerdos históricos y contextuales de los seres humanos, ni tampoco
entre la verdad y la ficción.
Por
ello el que Rorty haya aceptado la solicitud de la Universidad de
Stanford para enseñar literatura comparada no constituye un cambio sólo
académico, sino fundamentalmente programático, una declaración de
principios. Ya en la Universidad de Virginia enseñó, la mayor parte del
tiempo, filosofía no-analítica (Nietzsche, Heidegger, Derrida, etc.) a
estudiantes de literatura que eran los que mayoritariamente leían sus
libros.
Para
Rorty no tiene mayor relevancia el hecho de que le hayan llamado para
ocupar un puesto en la especialidad de literatura comparada y no en la
de filosofía; como mucho muestra el abismo entre la filosofía
no-analítica y la analítica en los departamentos de filosofía de las
universidades norteamericanas.
Rorty propone así realizar una eliminación de la distinción entre
géneros, pensar el conjunto de la cultura, de las ciencias exactas a la
poesía como una actividad única, continua y sin fisuras, en la que las
divisiones sean sólo practicas, institucionales y pedagógicas. [3]
En
el concepto de Rorty no hay ni jerarquía ni diferencia radical entre
las disciplinas o géneros discursivos, tanto en las así llamadas
humanidades como en las ciencias positivas. Una
y otra componen un todo de continuidad en el cual es necesario poner la
filosofía, la poesía, la novela, la crítica literaria, la sociología,
el ensayo, la mitología, la historia y las ciencias en general,
incluidas las ciencias matemáticas y naturales. Todo ello es «juego de
lenguaje» o de prácticas sociales variadas y diversamente relacionadas.
Rorty
ha sostenido en reiteradas ocasiones que la dedicación a la literatura
en muchos aspectos es más importante que la dedicación a la filosofía.
La literatura es más importante en un aspecto muy concreto, esto es,
cuando se trata de conseguir un progreso moral. La literatura contribuye
a la ampliación de la capacidad de imaginación moral, porque nos hace
más sensibles en la medida en que profundiza nuestra comprensión de las
diferencias entre las personas y de la diversidad de sus necesidades. La
filosofía es útil cuando se trata de resumir en principios los
resultados de la propia comprensión moral, pero no es de gran ayuda en
la ampliación de esta comprensión. Las reflexiones filosóficas sobre
cuestiones de moral no han contribuido mucho a la eliminación de la
esclavitud; al contrario de algunas narraciones sobre la vida de los
esclavos.
Así
Rorty sostendrá que es en realidad la literatura, y no la filosofía la
que puede promover un sentido genuino de la solidaridad humana, esto a
partir de la lectura de novelistas como Orwell y Nabokov. Se busca la
descripción ya no de formulaciones abstractas, sino de experiencias
humanas concretas, como el dolor o la traición, las que al ser
compartidas, generen la necesaria empatía desde la cual se geste la
solidaridad y la compasión.
Este proceso de llegar a concebir a los demás seres humanos como «uno
de nosotros», y no como «ellos», depende de una descripción detallada de
cómo son las personas que desconocemos y de una redescripción de de
cómo somos nosotros. Ello no es tarea de una teoría, sino de géneros
tales como la etnografía, el informe periodístico, el drama documental,
el cine y, especialmente, la novela. Ficciones como las de Dickens o
Richard Wright nos proporcionan detalles acerca de formas de sufrimiento
padecidas por personas en las que anteriormente no habíamos reparado.
Ficciones como las de Henry James o Nabokov nos dan detalles acerca de
la crueldad de la que somos capaces y, con ello, nos permiten
redescribirnos a nosotros mismos. Esa es la razón por la cual la novela,
el cine y la televisión poco a poco, pero ininterrumpidamente, han ido
reemplazando al sermón y al tratado como principales vehículos del
cambio y del progreso moral.
La razón literaria, en la medida en que es una razón «estética», es una razón «sensible» al sufrimiento del otro o, en otras palabras, es una «razón compasiva».
Sin
una imaginación literaria no es posible conmoverse ante el mal. La
educación sentimental y literaria busca formar individuos que sean
capaces de indignarse ante el horror. La razón educativa desde el punto
de vista literario es una razón perturbadora, es una razón sensible a la
humillación del otro. Vivimos en un tiempo en el que la razón
instrumental (medios-fines) amenaza con imponerse. Esto todavía resulta
más relevante con la aparición de la moderna ciencia económica, que,
junto a su principal instrumento técnico, la estadística, se ha
convertido en la ciencia social por excelencia.
La
realidad es inseparable de la ficción porque es inseparable del
lenguaje o de los lenguajes, de la palabra o de las palabras y de los
silencios. La realidad es inseparable de la ficción porque vivimos en un
«mundo interpretado», un mundo que muda y acerca del cual realizamos
múltiples redescripciones.
La
filosofía no hace más que mostrarnos la contingencia de nuestros
relatos —el hecho que dependen de prácticas sociales compartidas— y
facilitar una conversación con otros. Es más un género literario, una
novela en serie, que una disciplina que permita que sus cultores accedan
a una realidad que quedaría más allá de la historicidad de las
prácticas compartidas.
En
términos de Bloom, esto no es otra cosa que la conciencia de que las
convicciones más profundas que uno tiene son el resultado de un logro
poético y creador del pasado. A ello se añade el reconocimiento de que
nunca habrá un último poema, nunca un final del proceso de confrontación
con la historia. Siempre habrá espacio para la creación de sí mismo,
pero ninguna creación de sí mismo puede ser ratificada por algo que se
halle fuera de ella.
La
Ética se constituye como reflexión y disciplina precisamente porque la
razón humana es incierta, porque los seres humanos estamos conviviendo
en un mundo interpretado, en un universo simbólico, en el que todo lo
que hacemos y decimos se eleva sobre un horizonte de provisionalidad.
En el giro narrativo de la Ética propuesto
por Rorty se asume, pues, que no existe ninguna instancia metateórica
que legitime sus enunciados, ningún punto de vista trascendental, ningún
metaléxico, ningún dogma que consiga escapar a las figuras de las que
nos servimos para construir sentido.
- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO"
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
Universidad Andrés Bello UNAB
Universidad Complutense de Madrid
Eastern Mediterranean University - Academia.edu
E-mail: adolfovrocca@gmail.com
PUBLICACIONES
Publicaciones Internacionales Catalogadas en DIALNET Directorio de Publicaciones Científicas Hispanoamericanas
http://dialnet.unirioja.es/servlet/autor?codigo=1053859
Publications Scientific
http://de.scientificcommons.org/adolfo_v%C3%A1squez_rocca
Biblioteket og Aarhus Universitet, Denmark | Det Humanistiske Fakultet
http://www.statsbiblioteket.dk/
BIBLIOTECA UNI>ERSIA – Unesco - CSIC
http://biblioteca.universia.net/search.do?q=Adolfo+V%C3%A1squez+Rocca
Dr. Adolfo Vásquez Rocca - Eastern Mediterranean University - Academia.edu
http://emui.academia.edu/AdolfoVasquezRocca
Biblioteca Universidad Complutense de Madrid
Revistas Científicas Complutenses
Directorio de recursos digitales - Ministerio de Cultura, España
Biblioteca Asociación Filosófica UI
http://www.uruguaypiensa.org.uy/categoria_144_1_1.html
Eastern Mediterranean University - Academia.edu
http://emui.academia.edu/AdolfoVasquezRocca
Philosophy & Art: Pinterests Design
https://pinterest.com/adolfovrocca/
ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA PH.D. - CURRICULUM ACADÉMICO ABREVIADO
http://www.linkedin.com/pub/adolfo-vasquez-rocca/25/502/21a
Universidad Andrés Bello UNAB
Universidad Complutense de Madrid
Eastern Mediterranean University - Academia.edu
E-mail: adolfovrocca@gmail.com
Doctor en Filosofía por la Pontificia
Universidad Católica de Valparaíso; Postgrado Universidad Complutense de
Madrid, Departamento de Filosofía IV, mención Filosofía Contemporánea y
Estética. Profesor de Postgrado del Instituto de Filosofía de la
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso; Profesor de Antropología y
Estética en el Departamento de Artes y Humanidades de la Universidad
Andrés Bello UNAB. Profesor de la Escuela de Periodismo, Profesor Adjunto Escuela de Psicología y de la Facultad de Arquitectura UNAB Santiago. Profesor PEL Programa Especial de Licenciatura en Diseño,
UNAB – DUOC UC – En octubre de 2006 y 2007 es invitado por la
'Fundación Hombre y Mundo' y la UNAM a dictar un Ciclo de Conferencias
en México. – Miembro del Consejo Editorial Internacional de la 'Fundación Ética Mundial' de México. Director del Consejo Consultivo Internacional de 'Konvergencias', Revista de Filosofía y Culturas en Diálogo, Argentina. Miembro del Consejo Editorial Internacional de Revista Praxis – Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional UNA, Costa Rica. Miembro del Conselho Editorial da Humanidades em Revista, Universidade Regional do Noroeste do Estado do Rio Grande do Sul, Brasil y del Cuerpo Editorial de Sophia –Revista de Filosofía de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador–. –Secretario Ejecutivo de Revista Philosophica PUCV. –Asesor Consultivo de Enfocarte –Revista de Arte y Literatura– Cataluña / Gijón, Asturias, España. –Miembro del Consejo Editorial Internacional de 'Reflexiones Marginales' –Revista de la Facultad de Filosofía y Letras UNAM. –Editor Asociado de Societarts, Revista de artes y humanidades, adscrita a la Universidad Autónoma de Baja California. –Miembro del Comité Editorial de International Journal of Safety and Security in Tourism and Hospitality, publicación científica de la Universidad de Palermo. –Miembro de la Federación Internacional de Archivos Fílmicos (FIAF) con sede en Bruselas, Bélgica. Director de Revista Observaciones Filosóficas. Profesor visitante en la Maestría en Filosofía de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. – Profesor visitante Florida Christian University USA y Profesor Asociado al Grupo Theoria – Proyecto europeo de Investigaciones de Postgrado –UCM. Eastern Mediterranean University - Academia.edu.
Académico Investigador de la Vicerrectoría de Investigación y
Postgrado, Universidad Andrés Bello. –Investigador Asociado y Profesor
adjunto de la Escuela Matríztica de Santiago –dirigida por el Dr. Humberto Maturana. Consultor Experto del Consejo Nacional de Innovación para la Competitividad (CNIC)– Artista conceptual. Crítico de Arte. Ha publicado el Libro: Peter Sloterdijk; Esferas, helada cósmica y políticas de climatización,
Colección Novatores, Nº 28, Editorial de la Institución Alfons el
Magnànim (IAM), Valencia, España, 2008. Invitado especial a la
International Conference de la Trienal de Arquitectura de Lisboa | Lisbon Architecture Triennale 2011. Traducido al Francés - Publicado en la sección Architecture de la Anthologie: Le Néant Dans la Pensée Contemporaine . Publications du Centre Français d'Iconologie Comparée CFIC, Bès Editions , París, © 2012
PUBLICACIONES
Publicaciones Internacionales Catalogadas en DIALNET Directorio de Publicaciones Científicas Hispanoamericanas
http://dialnet.unirioja.es/servlet/autor?codigo=1053859
Publications Scientific
http://de.scientificcommons.org/adolfo_v%C3%A1squez_rocca
Biblioteket og Aarhus Universitet, Denmark | Det Humanistiske Fakultet
http://www.statsbiblioteket.dk/
BIBLIOTECA UNI>ERSIA – Unesco - CSIC
http://biblioteca.universia.net/search.do?q=Adolfo+V%C3%A1squez+Rocca
Dr. Adolfo Vásquez Rocca - Eastern Mediterranean University - Academia.edu
http://emui.academia.edu/AdolfoVasquezRocca
Biblioteca Universidad Complutense de Madrid
Revistas Científicas Complutenses
Directorio de recursos digitales - Ministerio de Cultura, España
Biblioteca Asociación Filosófica UI
http://www.uruguaypiensa.org.uy/categoria_144_1_1.html
Eastern Mediterranean University - Academia.edu
http://emui.academia.edu/AdolfoVasquezRocca
Philosophy & Art: Pinterests Design
https://pinterest.com/adolfovrocca/
ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA PH.D. - CURRICULUM ACADÉMICO ABREVIADO
http://www.linkedin.com/pub/adolfo-vasquez-rocca/25/502/21a
Adolfo Vasquez Rocca Filosofía contemporánea
[2] RORTY, Richard, Contingencia, ironía y solidaridad, Paidós, Barcelona, 1991, cap. 1 “La contingencia del lenguaje”.
[3] RORTY, Richard, Objetividad, relativismo y verdad, Ed. Paidós, Barcelona, 1996.
[4] RORTY, Richard, Filosofía y futuro, Ed. Gedisa, Barcelona, 2002
[5] VAIHINGER, La voluntad de ilusión en Nietzsche, en: Teorema, 1980.
[6] Ibid.
[7] «La
teoría psicoanalítica ha hecho de la noción de fantasía una noción tan
fecundamente problemática que ya no podríamos dar por sentada la
distinción entre arte y vida».
[8] GOODMAN, Nelson, Palabras, trabajos y mundos, en Maneras de hacer mundos, Visor, La balsa de la Medusa, Madrid, 1990, pp.17 –42.
[9] BLANCHOT, Maurice, Nietzsche et l'écriture en: L´entretien infini, Paris 1969. Hay versión castellana en: Nietzsche 125 años.
[10] BLOOM, Harold, Agon, pp. 43-44; Véase también Kabbalah and Critics, Nueva York, Seabury, 1975, p. 112.
[11] RORTY, Richard, Consecuencias del pragmatismo, Tecnos, Madrid, 1996. pág. 233.
Artículos y (URL's) en Revistas Especializadas sobre Richard Rorty, el Pragmatismo y el Neo-Pragmatismo. Fuente: Biblioteca Cervantes.
Artículos y (URL's) en Revistas Especializadas sobre Richard Rorty, el Pragmatismo y el Neo-Pragmatismo. Fuente: Biblioteca Cervantes.
IMÁGENES - Encabezado artículo: Pintura de Adolfo Vásquez Rocca; en Artelista; © Todos los derechos reservados.
* * * * *
Otros artículos de Adolfo Vásquez, en Revista Almiar: Joseph Beuys «Cada hombre, un artista». Los Documenta de Kassel o el Arte abandona la galería l Poética del ajedrez. Composición y escritos tácticos l Pina Bausch; Danza Abstracta y Psicodrama Analítico l Lo monstruoso en el arte l Georges Perèc o la literatura como arte combinatoria (Instrucciones de uso) l Coleccionismo y genealogía de la intimidad l Baudrillard; cultura, narcisismo y régimen de mortandad en el sistema de los objetos l Rostros y lugares del anonimato en la sobremodernidad l Richard Rorty; el pragmatismo y la filosofía como género literario l Alfredo Jaar; el secuestro de las imágenes y el Proyecto Ruanda
Revista Almiar (Madrid; España) / nº 34 / junio-julio 2007 - MARGEN CERO ™ (2007)
- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO"
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "Rorty: el Giro narrativo de la Ética o la Filosofía como género literario", en PHILOSOPHICA, Nº 29, 2006, PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE VALPARAÍSO, pp. 323 – 334
<http://serbal.pntic.mec.es/~cmunoz11/vasquez42.pdf>
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, “PRAGMATISMO Y POLÍTICA EN RORTY; LA CONSTRUCCIÓN DEL ESPACIO PÚBLICO”, En ASTROLABIO: Revista internacional de Filosofía, Nº 2, 2006, UNIVERSIDAD DE BARCELONA, pp. 24-34.
<http://www.ub.es/astrolabio/Articulos2/Victor.vasquez.rocca.pdf>
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RORTY: EL GIRO NARRATIVO DE LA ÉTICA O LA FILOSOFÍA COMO GÉNERO LITERARIO"
En A Parte Rei 42, noviembre de 2005, REVISTA DE LA SOCIEDAD DE ESTUDIOS FILOSÓFICOS DE MADRID.
http://serbal.pntic.mec.es/AParteRei/vasquez42.pdf
-
VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "PETER SLOTERDIJK: TEMBLORES DE AIRE, ATMOTERRORISMO Y CREPÚSCULO DE LA INMUNIDAD", En NÓMADAS, Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas - Universidad Complutense de Madrid, | Nº 17 | Enero-Junio 2008 -1º / 1 | pp. 159-168
<http://www.ucm.es/info/nomadas/17/avrocca_sloterdijk3.pdf>
- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, “PETER SLOTERDIJK: TREMORES DE AIR, ATMOTERRORISMO E CREPÚSCULO DA IMUNIDADE”, En SABERES, Revista Interdisciplinar de Filosofia e Educação, Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN), Brasil, Vol.. 2, Nº .3, dezembro 2009, <http://www.cchla.ufrn.br/saberes/Numero3/Artigos/Adolfo%20Vasquez%20Rocca_p.5-17.pdf>
Obra – Artefacto “MÁQUINA PANÓPTICA O HISTERIA EPISTEMOLÓGICA” de Adolfo Vásquez Rocca 2012
ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA → ART & PHILOSOPHY
Etiquetas: Antropología Arte Adolfo Vásquez Rocca Estética Psicoanálisis Postmodernidad Adolfo Vásquez Rocca Wikipedia Peter Sloterdijk Literatura Rosi Lopez Arte Filosofía Posmodernidad Diseño Adolfo Vásquez Rocca Arquitectura Psicología Filosofía Contemporánea
Rorty por Adolfo Vasquez Rocca Doctor en Filosofía
RORTY PRAGMATISMO, FILOSOFÍA Y LITERATURA POR ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO POR ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
Adolfo Vasquez Rocca | Universidad Complutense de Madrid
- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO"Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO" En Revista Almiar, MARGEN CERO © Fundadora de la Asociación de Revistas Culturales de España, ISSN 1695-4807 Nº 34 – 2007 <http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
OBRA TÍTULO: RICHARD RORTY; PRAGMATISMO Y LITERATURA AUTOR: ADOLFO
VÁSQUEZ ROCCA TÉCNICA MIXTA: Collage, intervención digital, tinta sobre
cartulina preparada. COLECCIÓN. LA CONDICIÓN POSTHUMANA AÑO. 2012 ©
Todos los derechos reservados En Artelista <http://www.artelista.com/obra/1697926411970320-richard-rorty-pragmatismo-y-literatura.html>
Rorty por Adolfo Vasquez Rocca Doctor en Filosofía
Adolfo Vasquez Rocca | Universidad Complutense de Madrid
RICHARD RORTY PRAGMATISMO, FILOSOFÍA Y LITERATURA POR ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
adolfovrocca@gmail.com
lunes, 17 de diciembre de 2012
MICHELANGELO ANTONIONI; EL CINE DE LA INCOMUNICACIÓN - REQUIEM POR LA MODERNIDAD POR ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso - Universidad Complutense de Madrid
ANTONIONI; DEL ANTINATURALISMO AL CINE DE LA INCOMUNICACÓN - REQUIEM POR LA MODERNIDAD
Dr. Adolfo Vásquez Rocca
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso - Universidad Complutense de Madrid
Antonioni por Adolfo Vasquez Rocca
Antonioni por Adolfo Vasquez Rocca
Quien
no haya visto nunca una película suya puede revisar los últimos
minutos de "El eclipse" (1962) y entender el legado de un director que
desarrolló una mirada única y supo evolucionar desde el documental y el
neorrealismo hasta el cine digital y el fragmentario registro de las
historias sin historia
de la posmodernidad. En la última secuencia de "El eclipse" se escucha a
Prokófiev. No hay diálogos. La cámara recorre las calles de Roma
desiertas en lentas panorámicas: los árboles mecidos por el viento,
riegos de agua en el asfalto, el rostro fragmentado de personajes a la
deriva. Antonioni muestra un mundo en suspenso, sus historias están
llenas de tiempos muertos. Todas sus aventuras se disuelven en la nada.
En la actualidad el cine de Antonioni es objeto de un renovado culto y ejerce una considerable influencia en muchos filmes de arte
contemporáneos, particularmente en el modo de filmar los silencios y
tiempos muertos, propios de un mundo desencantado y sin coartada
dramática. El cine de Antonioni es una inmóvil introspección del
malestar de nuestra cultura, de la angustia que corroe el alma. En su
estilo minimalista retrata la soledad y la incomunicación, el enigma de
un mundo desolado. Antonioni, el pintor del cine, retrató entornos
puramente artificiales –declaradamente antinaturalistas–,
fantasmagóricos, donde sus personajes deambulaban como huidizas figuras
de la ausencia.
Si
Fellini fue el cineasta del bullicio, de la Italia popular y
extravertida, Antonioni optó por retratar la introversión y la angustia
de la burguesía. Su hora favorita era el crepúsculo, y quizá la culpa
de tanta melancolía la tenía la niebla de Ferrara, en las llanuras del
Po, donde nació en 1912. Una niebla que difumina los contornos y
embalsama el tiempo. Su padre, un rico terrateniente, le proporcionó una
educación exquisita. Estudió Economía, Literatura, Teatro, Música y
Arte antes de ingresar en el Centro Experimental de Cinematografía,
semillero de resistencia contra el fascismo. Antonioni colabora como
asistente y guionista de Rossellini, de quien recibe una influencia
determinante en su futura orientación estilística. Esto no resulta
extraño dado que tras haber forjado una épica de la resistencia del
pueblo italiano a la dominación nazi en Roma, ciudad abierta y analizar
en "Paisá" el marco moral en el cual habría de elevarse la nueva
sociedad peninsular, Rossellini emprendió con "Alemania año cero"
(1947), el trazado del sendero sobre el cual el cine contemporáneo
daría sus primeros pasos. Precisamente, la propuesta entera de
Antonioni parece provenir del cuarto de hora final de "Alemania año
cero" con el largo y silencioso vagabundeo del Edmund por las cales de
un Berlín en ruinas que culmina con su suicidio, caída desdramatizada
desde lo alto de un edificio sin paredes. Los largometrajes que
Antonioni realiza a partir de "Crónica de un amor" (1951) funciona a
menudo sobre el dispositivo de un personaje que sólo es mostrado a
partir de su comportamiento y cuyos estados interiores se transmiten por
medio de las conexiones subjetivas que el paisaje establece con él.
La
influencia de Rossellini también se trasluce en Antonioni en la
elección de estratos sociales que retrata. Tal como aquel había
desplazado su foco de atención hacia las clases burguesas en "Europa
'51" y "Viaje en Italia".
Antonioni
dejaría de lado los sectores rurales de sus primeros filmes para
acometer, en la ficción, la indagación de las formas de vida de los
sectores de la alta burguesía, de los seres humanos económicamente
satisfechos.
Por
lo pronto, el retorno a una temática centrada en el mundo proletario se
produce en 1957 con "El grito" aunque aquí ya la mirada del cineasta
es muy distinta a la de los días del neorrealismo. Si bien permanece la
aproximación contemplativa de la realidad, esta ha sido modificada en
tanto se erige desde la conciencia alienada de una maquinada sociedad
industrial, en la que las elevadas torres de departamentos ocultan el
cielo y toda posible escapatoria. En este contexto geográfico es donde
Antonioni sitúa la acción de sus siguientes filmes, los que, a
continuación del éxito de "La aventura" en el Festival de Cannes de
1960, le valen el calificativo de "cineasta de la incomunicación".
"La
aventura" prolonga la reflexión de Antonioni acerca de la sociedad
desarrollada. Los protagonistas son burgueses deshonestos entre sí y
consigo mismos. El descubrimiento del vacío profundo que corroe sus
existencias. El filme, dominado por tiempos muertos, irritó a una vasta
parte del público y la crítica, pero la correspondencia moral de los
elementos empleados y la potencia de las imágenes –los actores vestidos
de oscuro paseando como fantasmas solitarios en la isla de piedra
blanca– consagraron al director.
Elegante
y empecinado en experimentar las posibilidades lingí¼ísticas del cine
como trasunto de revoluciones sociopolíticas, desde su aparente
distanciamiento moral. Con un cuidado casi enfermizo por el encuadre,
por la fotografía, pero sobre todo por los diálogos, realizó un
tríptico de amplios vuelos históricos sobre la burguesía
italiana/europea del desarrollismo vandálico de los sesenta: La aventura
(1960), La noche (1961) y El eclipse (1962), más tarde recuperadas por
Fassbinder en clave expresionista y tono de melodrama.
El
cine de Antonioni no construye argumentos al estilo clásico, sino más
bien por acumulación de escenas, que discurren igual intensidad y
generan una atmósfera de alta densidad. De ahí que sus películas
parezcan largas digresiones de acción sin relación aparente en la línea
argumental, esto es, sin aparente tensión dramática, en Antonioni
aparece el mundo sin coartada dramática1.
La
"trilogía de la incomunicación" se completó más tarde con "La noche"
(1961) y "El eclipse" (1962), dos películas de factura similar en la
que las mujeres y la confusión de los sentimientos ocupan un lugar
preponderante. La noche, que tiene en el rol principal a Marcello
Mastroianni como un escritor que despierta la admiración de los
potentados pero que se siente completamente falto de inspiración y
estímulos, es asimismo una lúcida visión de las implicaciones de ser
artista en un marco social regido por el lucro capitalista. El entorno
arquitectónico de la industrializada Milán desempeña en este filme un
papel de extrema complejidad, ya que remite al espectador a la noción de
que detrás de la superficialidad de la forma sólo existe el abismo del
vacío.
El
estilo antinaturalista que Antonioni había estado esbozando en estas
cintas pudo aparecer de modo nítido en "El desierto rojo" (1964), su
primer filme en color, protagonizado por la que entonces era su esposa y
estrella inevitable de sus películas, Mónica Vitti. "El desierto rojo"
significó una revolución estilística, creando un lenguaje y un estilo
hasta hoy emulado, a través del uso arbitrario de los colores, en
especial del rojo, que tiñe calzadas y murallas como objetivación de la
angustia de Giuliana en medio de un paisaje industrial, de un universo
de bidones, chimeneas y humos envenenados que emanan de las fábricas.
Aquí Antonioni inaugura las preocupaciones ambientalistas o al menos
las emplaza en el gran cine. El antinaturalismo de Antonioni busca
distanciarse de la organización "espontánea" de lo natural para retratar
la artificialidad de de las relaciones2.
Antonioni
advierte que ciertos movimientos de la cámara se ajustan mejor a
ciertos colores: una panorámica es eficaz con un rojo brillante, pero no
se consigue el mismo resultado con un verde áspero. Creía que había
cierta relación entre el movimiento de la cámara y el color, así se lo
comento3 en una ocasión a Godard.
Antonioni,
asimismo, concedía gran importancia a los silencios y a la banda
sonora con ruidos naturales y efectos sonoros, en algo muy próximo a la
música concreta4, dejando la música -en el sentido tradicional- en un lugar secundario.
Sintiendo
que ya había cumplido una etapa y cansado probablemente de ser
asociado al cliché de la "incomunicación" convertido en trivialidad y
ganando espacios en revistas de consejos para mujeres aburridas, es que
Antonioni emigra hacia Inglaterra. En ese país se despojó de las
preocupaciones en torno a las desavenencia crónica de la pareja y se
dedicó a desarrollar algunos tópicos que habían germinado en su obra
reciente: la confrontación entre la cultura clásica y el modernismo, el
choque entre lo antiguo y lo nuevo, los límites de la ficción en la era
de la incautación de lo real y del fin de las historias.
Para
dar cuerpo a estas ideas, convirtió a un fotógrafo de alta moda en el
protagonista de "Blow-up" (1966), su película más afamada y la que le
permitió ganar el Festival de Cannes. Las marcadas elípsis de la
narración y la ambigua importancia de hechos que quedan fuera de cuadro
desconcertaron a los espectadores atraídos por el escándalo que habían
causado un par de escenas de desnudos. "Blow-up" es un filme abstracto,
con una intriga policial apenas distinguible, que advierte a cada
instante al espectador de las limitaciones del espectáculo
cinematográfico y que extiende la reflexión de "La noche" en lo que
atañe al comercio del arte (la escena del concierto rock en que David
Hemmings recoge un pedazo de guitarra arrojado por los músicos a sus
fans para tirarlo a la basura cuando deja el recinto).
La
línea asumida en Blow-up se prolongó en las dos siguientes cintas de
habla inglesa de Antonioni, "Zabriskie Point" (1970) y "El pasajero"
(1975), aunque con un notorio resurgimiento de las inquietudes sociales
del director.
En
"Zabriskie Point" filmada con apoyo de la Metro en California y
Arizona, Antonioni introduce su cámara en las discusiones universitarias
en torno al posible advenimiento de la revolución en Estados Unidos y
toma partido sin tapujos por las posiciones progresistas.
Tras un largo paréntesis -su último largometraje personal databa de 1982 "Identificación de una mujer", Antonioni ya anciano consigue llevar a cabo un medio-metraje titulado "El filo peligroso de las cosas" (2001),
adaptado de un relato propio -escrito para la pantalla por su habitual
colaborador, el guionista Tonino Guerra. Se trata proyecto "Eros" (2001) una
trilogía junto a Steven Soderbergh y Wong Kar Wai. Aquí Antonioni no
consigue las densidades con las que construyó su territorio
cinematográfico, pero sirvió para sellar la leyenda. Este vino a ser su
último trabajo -no había filmado nada desde que en 1995 presentase "Más
allá de las nubes" en colaboración con Wim Wenders. El carácter de
homenaje a la figura de Antonioni de "Eros" queda patente desde la
propia presentación de cada uno de las piezas que componen el
largometraje, precedidas de una delicada pieza musical de Caetano Veloso
inequívocamente titulada "Michelangelo Antonioni".
Antonioni, el pintor del cine, nos ha dejado, cerrando una generación histórica del cinema italiano. Su muerte5
aconteció a los 94 años de edad el pasado 30 de Julio -coincidiendo con
la del director sueco Ingmar Bergman (otra leyenda del cine europeo).
Antonioni, seguramente, está iniciando sus periplos de inmortalidad,
allá, como diría Wim Wenders, "Más allá de las nubes".
Dr. Adolfo Vásquez Rocca
Doctor
en Filosofía por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso;
Postgrado Universidad Complutense de Madrid, Departamento de Filosofía
IV, Teoría del Conocimiento y Pensamiento Contemporáneo. Áreas de
Especialización: Antropología y Estética. Profesor de Postgrado del
Instituto de Filosofía de la PUCV, del Magíster en Etnopsicología,
Escuela de Psicología PUCV, Profesor de Antropología y de Estética en
el Departamento de Artes y Humanidades de la UNAB. Profesor asociado al
Grupo Theoria, Proyecto europeo de Investigaciones de Postgrado.
Director de la Revista Observaciones Filosóficas http://www.observacionesfilosoficas.net/. Secretario de Ejecutivo de PHILOSOPHICA, Revista del Instituto de Filosofía de la PUCV http://www.philosophica.ucv.cl/editorial.htm, Editor Asociado de Psikeba €”Revista de Psicoanálisis y Estudios Culturales, Buenos Aires€” http://www.psikeba.com.ar/, miembro del Consejo Editorial de Escaner Cultural €”Revista de arte contemporáneo y nuevas tendencias€” http://www.escaner.cl/ y Director del Consejo Consultivo Internacional de Konvergencias, Revista de Filosofía y Culturas en Diálogo.
Bibliografía
Michelangelo Antonioni : un poeta de la visión, Tassone, Aldo, Lozano Coello, Ángel, 1ª ed., 1ª imp., 2005, Fluir Ediciones, S.L.U., Ourense
Michaelangelo Antonioni, Seymour Chatman, Paul Duncan, 1ª, 2003, Editorial Taschen, Colonia
Michelangelo Antonioni, Font Blanch, Doménech, 1ª ed., 1ª imp, 2003, Ediciones Cátedra, S.A, Madrid
Michelangelo Antonioni, Tinazzi, Giorgio, Infante Escudero, Natalia, tr., 1ª ed., 1ª imp., 2005, Bilbao, Ediciones Mensajero, S.A. Unipersonal
1VÁSQUEZ
ROCCA, Adolfo, "Baudrillard; de la metástasis de la imagen a la
incautación de lo real", En EIKASIA. Revista de Filosofía, Oviedo.
España. ISSN 1885-5679, año II, Nº 11 (julio 2007) pp. 53-59. http://www.revistadefilosofia.com/11-02.pdf
2Da Amor vacui. Il cinema di Michelangelo Antonioni, Chieti, Métis, 1990, p. 232
3TASSONE
& LOZANO, Aldo & Coello, Ángel Antonioni, Michelangelo un poeta
de la visión, 1ª ed., 2005, Fluir Ediciones, S.L.U., Ourense
4VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "Música concreta y Filosofía contemporánea; Registros polifónicos" Reedición ampliada.
En Cuenta y Razón del Pensamiento Actual Revista de la Fundación de Estudios Sociológicos (FUNDES) Madrid.
5Reportaje de la RAI sobre la muerte y filmografía de Michelangelo Antonioni: http://www.youtube.com/watch?v=feVKGQl4CYk&mode=related&search=
Quien no haya visto nunca una película suya puede revisar los últimos minutos de “El eclipse”
(1962) y entender el legado de un director que desarrolló una mirada
única y supo evolucionar desde el documental y el neorrealismo hasta el
cine digital y el fragmentario registro de las historias sin historia de la posmodernidad. En la última secuencia de “El eclipse” se escucha a Prokófiev. No hay diálogos. La cámara recorre las calles de Roma
desiertas en lentas panorámicas: los árboles mecidos por el viento,
riegos de agua en el asfalto, el rostro fragmentado de personajes a la
deriva. Antonioni muestra un mundo en suspenso, sus historias están llenas de tiempos muertos. Todas sus aventuras se disuelven en la nada.
En la actualidad el cine de Antonioni es objeto de un renovado culto y ejerce una considerable influencia en muchos filmes de arte
contemporáneos, particularmente en el modo de filmar los silencios y
tiempos muertos, propios de un mundo desencantado y sin coartada
dramática. El cine de Antonioni es una inmóvil introspección del malestar de nuestra cultura, de la angustia que corroe el alma. En su estilo minimalista retrata la soledad y la incomunicación, el enigma de un mundo desolado. Antonioni,
el pintor del cine, retrató entornos puramente artificiales
–declaradamente antinaturalistas–, fantasmagóricos, donde sus personajes
deambulaban como huidizas figuras de la ausencia.
Si Fellini fue el cineasta del bullicio, de la Italia popular y extravertida, Antonioni optó
por retratar la introversión y la angustia de la burguesía. Su hora
favorita era el crepúsculo, y quizá la culpa de tanta melancolía la
tenía la niebla de Ferrara,
en las llanuras del Po, donde nació en 1912. Una niebla que difumina
los contornos y embalsama el tiempo. Su padre, un rico terrateniente, le
proporcionó una educación exquisita. Estudió Economía, Literatura,
Teatro, Música y Arte antes de ingresar en el Centro Experimental de Cinematografía,
semillero de resistencia contra el fascismo. Antonioni colabora como
asistente y guionista de Rossellini, de quien recibe una influencia
determinante en su futura orientación estilística. Esto no resulta
extraño dado que tras haber forjado una épica de la resistencia del
pueblo italiano a la dominación nazi en Roma, ciudad abierta y analizar
en “Paisá” el marco moral en el cual habría de elevarse la nueva sociedad peninsular, Rossellini emprendió con “Alemania año cero”
(1947), el trazado del sendero sobre el cual el cine contemporáneo
daría sus primeros pasos. Precisamente, la propuesta entera de Antonioni parece provenir del cuarto de hora final de “Alemania año cero”,
con el largo y silencioso vagabundeo del Edmund por las cales de un
Berlín en ruinas que culmina con su suicidio, caída desdramatizada desde
lo alto de un edificio sin paredes. Los largometrajes que Antonioni
realiza a partir de “Crónica de un amor”
(1951) funciona a menudo sobre el dispositivo de un personaje que sólo
es mostrado a partir de su comportamiento y cuyos estados interiores se
transmiten por medio de las conexiones subjetivas que el paisaje
establece con él.
La influencia de Rossellini también
se trasluce en Antonioni en la elección de estratos sociales que
retrata. Tal como aquel había desplazado su foco de atención hacia las
clases burguesas en “Europa '51” y “Viaje en Italia”.
Antonioni
dejaría de lado los sectores rurales de sus primeros filmes para
acometer, en la ficción, la indagación de las formas de vida de los
sectores de la alta burguesía, de los seres humanos económicamente
satisfechos.
Por lo pronto, el retorno a una temática centrada en el mundo proletario se produce en 1957 con “El grito”,
aunque aquí ya la mirada del cineasta es muy distinta a la de los días
del neorrealismo. Si bien permanece la aproximación contemplativa de la
realidad, esta ha sido modificada en tanto se erige desde la conciencia
alienada de una maquinada sociedad industrial, en la que las elevadas
torres de departamentos ocultan el cielo y toda posible escapatoria. En
este contexto geográfico es donde Antonioni sitúa la acción de sus
siguientes filmes, los que, a continuación del éxito de “La aventura” en el Festival de Cannes de 1960, le valen el calificativo de “cineasta de la incomunicación”.
“La aventura”
prolonga la reflexión de Antonioni acerca de la sociedad desarrollada.
Los protagonistas son burgueses deshonestos entre sí y consigo mismos.
El descubrimiento del vacío profundo que corroe sus existencias. El
filme, dominado por tiempos muertos,
irritó a una vasta parte del público y la crítica, pero la
correspondencia moral de los elementos empleados y la potencia de las
imágenes –los actores vestidos de oscuro paseando como fantasmas
solitarios en la isla de piedra blanca– consagraron al director.
Elegante
y empecinado en experimentar las posibilidades lingüísticas del cine
como trasunto de revoluciones sociopolíticas, desde su aparente
distanciamiento moral. Con un cuidado casi enfermizo por el encuadre,
por la fotografía, pero sobre todo por los diálogos, realizó un tríptico
de amplios vuelos históricos sobre la burguesía italiana/europea del
desarrollismo vandálico de los sesenta: La aventura (1960), La noche (1961) y El eclipse (1962), más tarde recuperadas por Fassbinder en clave expresionista y tono de melodrama.
El cine de Antonioni
no construye argumentos al estilo clásico, sino más bien por
acumulación de escenas, que discurren igual intensidad y generan una
atmósfera de alta densidad. De ahí que sus películas parezcan largas
digresiones de acción sin relación aparente en la línea argumental, esto
es, sin aparente tensión dramática, en Antonioni aparece el mundo sin coartada dramática1.
La “trilogía de la incomunicación” se completó más tarde con “La noche” (1961) y “El eclipse”
(1962), dos películas de factura similar en la que las mujeres y la
confusión de los sentimientos ocupan un lugar preponderante. La noche, que tiene en el rol principal a Marcello Mastroianni
como un escritor que despierta la admiración de los potentados pero que
se siente completamente falto de inspiración y estímulos, es asimismo
una lúcida visión de las implicaciones de ser artista en un marco social
regido por el lucro capitalista. El entorno arquitectónico de la
industrializada Milán desempeña en este filme un papel de extrema
complejidad, ya que remite al espectador a la noción de que detrás de la
superficialidad de la forma sólo existe el abismo del vacío.
El estilo antinaturalista que Antonioni había estado esbozando en estas cintas pudo aparecer de modo nítido en “El desierto rojo” (1964), su primer filme en color, protagonizado por la que entonces era su esposa y estrella inevitable de sus películas, Mónica Vitti. “El desierto rojo”
significó una revolución estilística, creando un lenguaje y un estilo
hasta hoy emulado, a través del uso arbitrario de los colores, en
especial del rojo, que tiñe calzadas y murallas como objetivación de la
angustia de Giuliana en medio de un paisaje industrial,
de un universo de bidones, chimeneas y humos envenenados que emanan de
las fábricas. Aquí Antonioni inaugura las preocupaciones ambientalistas o
al menos las emplaza en el gran cine. El antinaturalismo de Antonioni busca distanciarse de la organización "espontánea" de lo natural para retratar la artificialidad de de las relaciones2.
Antonioni
advierte que ciertos movimientos de la cámara se ajustan mejor a
ciertos colores: una panorámica es eficaz con un rojo brillante, pero no
se consigue el mismo resultado con un verde áspero. Creía que había
cierta relación entre el movimiento de la cámara y el color, así se lo
comento3 en una ocasión a Godard.
Antonioni,
asimismo, concedía gran importancia a los silencios y a la banda sonora
con ruidos naturales y efectos sonoros, en algo muy próximo a la música concreta4, dejando la música -en el sentido tradicional- en un lugar secundario.
Sintiendo que ya había cumplido una etapa y cansado probablemente de ser asociado al cliché de la “incomunicación”,
convertido en trivialidad y ganando espacios en revistas de consejos
para mujeres aburridas, es que Antonioni emigra hacia Inglaterra. En ese
país se despojó de las preocupaciones en torno a las desavenencia
crónica de la pareja y se dedicó a desarrollar algunos tópicos que
habían germinado en su obra reciente: la confrontación entre la cultura
clásica y el modernismo,
el choque entre lo antiguo y lo nuevo, los límites de la ficción en la
era de la incautación de lo real y del fin de las historias.
Para dar cuerpo a estas ideas, convirtió a un fotógrafo de alta moda en el protagonista de “Blow-up” (1966), su película más afamada y la que le permitió ganar el Festival de Cannes.
Las marcadas elípsis de la narración y la ambigua importancia de hechos
que quedan fuera de cuadro desconcertaron a los espectadores atraídos
por el escándalo que habían causado un par de escenas de desnudos. “Blow-up”
es un filme abstracto, con una intriga policial apenas distinguible,
que advierte a cada instante al espectador de las limitaciones del
espectáculo cinematográfico y que extiende la reflexión de “La noche”
en lo que atañe al comercio del arte (la escena del concierto rock en
que David Hemmings recoge un pedazo de guitarra arrojado por los músicos
a sus fans para tirarlo a la basura cuando deja el recinto).
La línea asumida en Blow-up se prolongó en las dos siguientes cintas de habla inglesa de Antonioni, “Zabriskie Point” (1970) y “El pasajero” (1975), aunque con un notorio resurgimiento de las inquietudes sociales del director.
En “Zabriskie Point”,
filmada con apoyo de la Metro en California y Arizona, Antonioni
introduce su cámara en las discusiones universitarias en torno al
posible advenimiento de la revolución en Estados Unidos y toma partido
sin tapujos por las posiciones progresistas.
Tras un largo paréntesis -su último largometraje personal databa de 1982 “Identificación de una mujer”, Antonioni ya anciano consigue llevar a cabo un medio-metraje titulado “El filo peligroso de las cosas” (2001),
adaptado de un relato propio -escrito para la pantalla por su habitual
colaborador, el guionista Tonino Guerra. Se trata proyecto “Eros” (2001) una trilogía junto a Steven Soderbergh y Wong Kar Wai.
Aquí Antonioni no consigue las densidades con las que construyó su
territorio cinematográfico, pero sirvió para sellar la leyenda. Este
vino a ser su último trabajo -no había filmado nada desde que en 1995
presentase “Más allá de las nubes”, en colaboración con Wim Wenders. El
carácter de homenaje a la figura de Antonioni de “Eros” queda patente
desde la propia presentación de cada uno de las piezas que componen el
largometraje, precedidas de una delicada pieza musical de Caetano Veloso
inequívocamente titulada "Michelangelo Antonioni".
Antonioni, el pintor del cine, nos ha dejado, cerrando una generación histórica del cinema italiano. Su muerte5 aconteció a los 94 años de edad el pasado 30 de Julio -coincidiendo con la del director sueco Ingmar Bergman (otra leyenda del cine europeo). Antonioni, seguramente, está iniciando sus periplos de inmortalidad, allá, como diría Wim Wenders, “Más allá de las nubes”.
Adolfo Vásquez Rocca
Dr. Adolfo Vásquez Rocca
Doctor
en Filosofía por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso;
Postgrado Universidad Complutense de Madrid, Departamento de Filosofía
IV, Teoría del Conocimiento y Pensamiento Contemporáneo. Áreas de
Especialización: Antropología y Estética. Profesor de Postgrado del
Instituto de Filosofía de la PUCV, del Magíster en Etnopsicología,
Escuela de Psicología PUCV, Profesor de Antropología y de Estética en el
Departamento de Artes y Humanidades de la UNAB. Profesor asociado al
Grupo Theoria, Proyecto europeo de Investigaciones de Postgrado.
Director de la Revista Observaciones Filosóficas http://www.observacionesfilosoficas.net/. Secretario de Ejecutivo de PHILOSOPHICA, Revista del Instituto de Filosofía de la PUCV http://www.philosophica.ucv.cl/editorial.htm, Editor Asociado de Psikeba —Revista de Psicoanálisis y Estudios Culturales, Buenos Aires— http://www.psikeba.com.ar/, miembro del Consejo Editorial de Escaner Cultural —Revista de arte contemporáneo y nuevas tendencias— http://www.escaner.cl/ y Director del Consejo Consultivo Internacional de Konvergencias, Revista de Filosofía y Culturas en Diálogo.
Bibliografía
Michelangelo Antonioni : un poeta de la visión, Tassone, Aldo, Lozano Coello, Ángel, 1ª ed., 1ª imp., 2005, Fluir Ediciones, S.L.U., Ourense
Michaelangelo Antonioni, Seymour Chatman, Paul Duncan, 1ª, 2003, Editorial Taschen, Colonia
Michelangelo Antonioni, Font Blanch, Doménech, 1ª ed., 1ª imp, 2003, Ediciones Cátedra, S.A, Madrid
Michelangelo Antonioni, Tinazzi, Giorgio, Infante Escudero, Natalia, tr., 1ª ed., 1ª imp., 2005, Bilbao, Ediciones Mensajero, S.A. Unipersonal
Notas y Referencias:
1VÁSQUEZ
ROCCA, Adolfo, "Baudrillard; de la metástasis de la imagen a la
incautación de lo real", En EIKASIA. Revista de Filosofía, Oviedo.
España. ISSN 1885-5679, año II, Nº 11 (julio 2007) pp. 53-59. http://www.revistadefilosofia.com/11-02.pdf
2Da Amor vacui. Il cinema di Michelangelo Antonioni, Chieti, Métis, 1990, p. 232
3TASSONE
& LOZANO, Aldo & Coello, Ángel Antonioni, Michelangelo un poeta
de la visión, 1ª ed., 2005, Fluir Ediciones, S.L.U., Ourense
4VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "Música concreta y Filosofía contemporánea; Registros polifónicos” Reedición ampliada.
En Cuenta y Razón del Pensamiento Actual Revista de la Fundación de Estudios Sociológicos (FUNDES) Madrid.
5Reportaje de la RAI sobre la muerte y filmografía de Michelangelo Antonioni: http://www.youtube.com/watch?v=feVKGQl4CYk&mode=related&search=
Artículos Relacionados:
Adolfo Vásquez Rocca, “Raúl Ruiz y Peter Greenaway; Poética del Cine, Deconstrucción y Arte Combinatorio”, En ESCANER CULTURAL, Revista de arte contemporáneo y nuevas tendencias, Nº 99 – noviembre 2007, Santiago.
http://revista.escaner.cl/node/479
http://revista.escaner.cl/node/479
Artículo "Antonioni; el cine de la incomunicación; Réquiem por la modernidad",
En Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 35 - 2007 Margen Cero © ,
Fundadora de la Asociación de Revistas Culturales de España, ISSN
1695-4807
http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/michelangelo_antonioni.html
http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/michelangelo_antonioni.html
Artículo “Peter Sloterdijk; miembro de la Academia de las Artes de Berlín y de 'Das Philosophische Quartett' “, En Escáner Cultural, Revista de arte contemporáneo y nuevas tendencias, Nº 96, SANTIAGO.
http://revista.escaner.cl/node/273
http://revista.escaner.cl/node/273
Artículo "Baudrillard; de la metástasis de la imagen a la incautación de lo real", En EIKASIA. Revista de Filosofía, OVIEDO, ESPAÑA. ISSN 1885-5679, año II, Nº 11 (julio 2007) pp. 53-59.
http://www.revistadefilosofia.com/11-02.pdf
http://www.revistadefilosofia.com/11-02.pdf
Ensayo "La moda en la postmodernidad. Deconstrucción del fenómeno fashion", En Enfocarte.com, Nº 26, Publicación Patrocinada por la Secretaría de Cultura Gobierno de Buenos Aires.
http://www.enfocarte.com/5.26/moda.html
Ensayos - Adolfo Vásquez Rocca
"Raúl Ruiz y la deconstrucción de la teoría del conflicto central"
Ensayos sobre la Postmodernidad en el Arte
En Revista Miradas, Escuela Internacional de Cine y Televisión, La Habana, Cuba, número 8, 2005.
Artículo “Raúl Ruiz; L'enfant terrible de la Vanguardia parisina”, En MARGEN CERO ©, MADRID, 2005, Fundadora de la Asociación de Revistas Culturales de España, ISSN 1695-4807
http://www.margencero.com/articulos/articulos2/raul_ruiz.htm
http://www.enfocarte.com/5.26/moda.html
Ensayos - Adolfo Vásquez Rocca
"Raúl Ruiz y la deconstrucción de la teoría del conflicto central"
Ensayos sobre la Postmodernidad en el Arte
En Revista Miradas, Escuela Internacional de Cine y Televisión, La Habana, Cuba, número 8, 2005.
Artículo “Raúl Ruiz; L'enfant terrible de la Vanguardia parisina”, En MARGEN CERO ©, MADRID, 2005, Fundadora de la Asociación de Revistas Culturales de España, ISSN 1695-4807
http://www.margencero.com/articulos/articulos2/raul_ruiz.htm
Antonioni por Adolfo Vasquez Rocca
Michelangelo Antonioni; el cine de la Incomunicación Por Adolfo Vásquez Rocca PH. D.
Michelangelo Antonioni
Filmografía
- Eros (2004) (el segmento llamado "Il filo pericoloso delle cose"/El hilo peligroso de las cosas)
- Lo Sguardo di Michelangelo, (2004) La mirada de Michelangelo
- Al di là delle nuvole (1995) Más allá de las nubes (España) Codirigida con Wim Wenders
- Noto, Mandorli, Vulcano, Stromboli, Carnevale (1993)
- 12 registi per 12 città (1989) (Segmento: "Roma") 12 directores para 12 ciudades
- Kumbha Mela (1989)
- Identificazione di una donna (1982) Identificación de una mujer (España)
- Il Mistero di Oberwald, (1981) El misterio de Oberwald (España) Basada en un relato de Jean Cocteau
- Suffer or Die (1979) Sufra o muera
- Professione: reporter (1975) El reportero (España)
- Chung Kuo - Cina (1972)
- Zabriskie Point (1970), con música de Pink Floyd
- Blow-up (1966) Blow-Up (Deseo de una mañana de verano) (España) (Film basado en el relato "Las babas del diablo", de Julio Cortázar
- I Tre volti, (1965) Las tres caras (segmento "Il provino"/La pruebita) tcc Tres perfiles de mujer (España)
- Il Deserto rosso, (1964) El desierto rojo (España)
- L'Eclisse (1962) El eclipse (España)
- La Notte (1961) La noche (España)
- L'Avventura (1960) La aventura (Argentina) (España)
- Nel segno di Roma (1959) (Uncredited) Bajo el signo de Roma (España)
- Il Grido (1957) El grito (Argentina) (España)
- Le Amiche (1955) tcc Las amigas (España), Basada en un relato de Cesare Pavese
- L'Amore in città (1953) (Segmento "Tentato suicido"/Intentado suicidio) tcc Amor en la ciudad (España)
- I Vinti (1953) Los vencidos
- La Signora senza camelie (1953) La señora sin camelias
- Cronaca di un amore (1950) Crónica de un amor
- La Funivia del faloria (1950) El funicular del (monte) Faloria
- La Villa dei mostri (1950) El caserón de los monstruos
- L'Amorosa menzogna (1949) La amorosa mentira
- Bomarzo (1949)
- Ragazze in bianco (1949) Muchachas de blanco
- Sette canne, un vestito (1949) Siete perros, un vestido
- Superstizione (1949) Superstición
- Nettezza urbana (1948) Limpieza (de basura) urbana
- Oltre l'oblio (1948) Tras el olvido
- Roma-Montevideo (1948)
- Gente del Po (1943)
RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO NORTEAMERICANO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO POR ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA PHD.
MICHELANGELO ANTONIONI; EL CINE DE LA INCOMUNICACIÓN - REQUIEM POR LA MODERNIDAD Por Adolfo Vásquez Rocca
Doctor
en Filosofía por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso;
Postgrado Universidad Complutense de Madrid, Departamento de Filosofía
IV, mención Filosofía Contemporánea y Estética. Profesor de Postgrado del Instituto de Filosofía de la Pontificia
Universidad Católica de Valparaíso; Profesor de Antropología y Estética
en el Departamento de Artes y Humanidades de la Universidad Andrés
Bello UNAB. Profesor de la Escuela de Periodismo, Profesor Adjunto Escuela de Psicología y de la Facultad de Arquitectura UNAB Santiago. Profesor PEL Programa Especial de Licenciatura en Diseño, UNAB – DUOC UC – En octubre de 2006 y 2007 es invitado por la 'Fundación
Hombre y Mundo' y la UNAM a dictar un Ciclo de Conferencias en
México. – Miembro del Consejo Editorial Internacional de la
'Fundación Ética Mundial' de México. Director del Consejo Consultivo
Internacional de 'Konvergencias', Revista de Filosofía y Culturas en
Diálogo, Argentina. Miembro del Consejo Editorial Internacional de Revista Praxis – Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional UNA, Costa Rica. Miembro del Conselho Editorial da Humanidades em Revista, Universidade Regional do Noroeste do Estado do Rio Grande do Sul, Brasil y del Cuerpo Editorial de Sophia –Revista de Filosofía de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador–. –Secretario Ejecutivo de Revista Philosophica PUCV. –Asesor Consultivo de Enfocarte –Revista de Arte y Literatura– Cataluña / Gijón, Asturias, España. –Miembro del Consejo Editorial Internacional de 'Reflexiones Marginales' –Revista de la Facultad de Filosofía y Letras UNAM. –Editor Asociado de Societarts, Revista de artes y humanidades, adscrita a la Universidad Autónoma de Baja California. –Miembro del Comité Editorial de International Journal of Safety and Security in Tourism and Hospitality, publicación científica de la Universidad de Palermo. –Miembro de la Federación Internacional de Archivos Fílmicos (FIAF) con sede en Bruselas, Bélgica. Director de Revista Observaciones Filosóficas.
Profesor visitante en la Maestría en Filosofía de la Benemérita
Universidad Autónoma de Puebla. – Profesor visitante Florida Christian University USA y Profesor Asociado al Grupo Theoria
– Proyecto europeo de Investigaciones de Postgrado –UCM. Eastern Mediterranean University - Academia.edu. Académico
Investigador de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado,
Universidad Andrés
Bello. –Investigador Asociado y Profesor adjunto de la Escuela Matríztica de Santiago –dirigida por el Dr. Humberto Maturana. Consultor Experto del Consejo Nacional de Innovación para la Competitividad (CNIC)– Artista conceptual. Crítico de Arte. Ha
publicado el Libro: Peter Sloterdijk; Esferas, helada
cósmica y políticas de climatización, Colección Novatores, Nº 28,
Editorial de la Institución Alfons el Magnànim (IAM), Valencia,
España, 2008. Invitado especial a la International Conference de la Trienal de Arquitectura de Lisboa | Lisbon Architecture Triennale 2011. Traducido al Francés - Publicado en la sección Architecture de la Anthologie: Le Néant Dans la Pensée Contemporaine
. Publications du Centre Français d'Iconologie Comparée CFIC, Bès Editions
, París, © 2012
PUBLICACIONES
Publicaciones Internacionales Catalogadas en DIALNET Directorio de Publicaciones Científicas Hispanoamericanas
http://dialnet.unirioja.es/servlet/autor?codigo=1053859
RICHARD RORTY PRAGMATISMO, FILOSOFÍA Y LITERATURA POR ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
Revista Almiar, MARGEN CERO, MADRID, Nº 34 Julio – agosto 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
- VÁSQUEZ ROCCA, Adolfo, "RICHARD RORTY; DEL PRAGMATISMO A LA FILOSOFÍA COMO GENERO LITERARIO"
En Revista Almiar, MARGEN CERO © Fundadora de la Asociación de Revistas Culturales de España, ISSN 1695-4807 Nº 34 – 2007
<http://www.margencero.com/articulos/articulos_taber/rorty.html>
OBRA TÍTULO: RICHARD RORTY; PRAGMATISMO Y LITERATURA
AUTOR: ADOLFO VÁSQUEZ ROCCA
TÉCNICA MIXTA: Collage, intervención digital, tinta sobre cartulina preparada.
COLECCIÓN. LA CONDICIÓN POSTHUMANA
AÑO. 2012
© Todos los derechos reservados
En Artelista
<http://www.artelista.com/obra/1697926411970320-richard-rorty-pragmatismo-y-literatura.html>
Rorty por Adolfo Vasquez Rocca Doctor en Filosofía
Adolfo Vasquez Rocca | Universidad Complutense de Madrid
adolfovrocca@gmail.com